La vicepresidenta de la República, Verónica Abad, rompió el silencio que mantenía desde que se hizo pública la investigación que adelanta la Fiscalía General del Estado (FGE) en contra de su hijo, Francisco Barreiro Abad, por el presunto delito de tráfico de influencias.
Abad informó a un medio costarricense que existe un proceso de presiones para que renuncie a su cargo. También manifestó que la Cancillería de Ecuador no estaría cumpliendo con los compromisos adquiridos para que pueda cumplir con la misión encomendada por el presidente de la República, Daniel Noboa.
La vicepresidenta además reveló algunos motivos por los cuales se distanció del presidente, indicando que las negociaciones en el Parlamento estarían en dirección contraria a la propuesta que hicieron en las elecciones adelantadas, el 15 de octubre del 2023.
Durante la entrevista concedida al canal televisivo OPA de Costa Rica, Abad reconoció que su distanciamiento con el presidente tendría, entre sus motivaciones, el pacto que ya se configuraba en el Parlamento entre las fuerzas del partido de Gobierno, el Partido Social Cristiano y el correísmo.
“Fui muy clara cuando partí de Ecuador que no estoy de acuerdo con el presidente por haber hecho ese pacto, haber roto toda promesa y todo compromiso con el pueblo ecuatoriano”., dijo.
Puntualizó que el incremento del Impuesto al Valor Agregado (IVA) es una prueba de que se están incumpliendo los compromisos con el ciudadano, al tiempo que criticó las cifras de los nuevos empleos que difunde el Gobierno. “El hecho de los empleos inexistentes de Ecuador, hemos visto obviamente cifras claras que nos da el seguro social y cifras que nos da la migración por la falta de empleo”.
Para Abad, la razón de los ataques en su contra es “no estar de acuerdo con eso (políticas presidenciales)”, indicando que ahora todo el peso del Estado está en su contra.
Destacó que a pesar de eso sigue propiciando “siempre el llamado al diálogo, porque lo que menos soy es totalitaria”.
Abad detalló que el pacto entre el presidente y el correísmo va en contra de las aspiraciones de los ecuatorianos y explicó que la entrega de las principales comisiones dentro de la Asamblea Nacional, como la de Fiscalización que hoy está en manos del correísmo es una demostración “de que nunca tuvimos claridad sobre qué estaban hechos los pactos”.
Acotó que, con este pacto, lo que se buscaba era tener listo un juicio político en su contra en caso de no aceptar el mandato presidencial de asumir como embajadora en Israel, “por eso mi aceptación a cumplir con el mandato de venir a Israel, cumpliendo con el propósito y el decreto 27”, recordó.