Ecuador condiciona diálogo con México ante la OEA

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En la continuación de la sesión de la Organización de Estados Americanos (OEA) en la que se abordó el asalto a la embajada de México en Ecuador, la mayoría de países miembros instaron a resolver el conflicto mediante el diálogo y en pro de la paz de la región.

Alejandro Dávalos, vicecanciller de Ecuador, respondió que su país aprecia el llamado de la OEA para encontrar una salida al conflicto diplomático con México. Y, aunque enfatizó que el Gobierno de Daniel Noboa está dispuesto a avanzar en una solución pacífica y negociada de diferencias, también mencionó que la conciliación pasa por convenir en las bases de un nuevo entendimiento bilateral y respetuoso de la soberanía y la ley.

A criterio de Dávalos, lo ocurrido con México, llama a la necesidad de actualizar y fortalecer las Convenciones Regionales en materia de asilo diplomático, como medio idóneo para evidenciar la voluntad de los países miembros de extirpar los tentáculos del crimen organizado.

“No se puede desnaturalizar y desvirtuar el asilo diplomático”, puntualizó.

Alejando Dávalos citó artículos de la Convención de Caracas y la Convención de Montevideo, que determinan como ilícito el conceder asilo a personas que están siendo procesadas por delitos comunes ante tribunales competentes.

“La concesión de asilo cuando es por delitos comunes y condenas ante tribunales competentes constituyen un acto ilícito del que lo concede, lo cual apoya a la evasión de la justicia, promoviendo la impunidad”, aseveró.

El diplomático ecuatoriano, que reemplazó a la canciller Gabriela Sommerfeld, indicó que el respeto al estado de derecho y realización de la justicia no debe dar pie a ninguna acción de impunidad, incluido el mal uso de asilo diplomático. Así que reiteró que Jorge Glas es un delincuente común, cuya calidad no ha sido desvirtuada por ninguna corte.

“Reitero el rechazo a las declaraciones ofensivas a la dignidad de la nación ecuatoriana y al primer mandatario, que lidera la cruzada del país en contra del narcoterrismo, corrupción e impunidad”, remarcó.

Alejandro Dávalos insistió en que México supuestamente tuvo la pretensión de debilitar un proceso democrático a través de un ejercicio impropio de su embajada: “Es inadmisible, promueve la impunidad y hiere a la región”.

Mientras, los representantes de Chile, Estados Unidos, Belice, Brasil, Guayana, Costa Rica, República Dominicana, Panamá, Uruguay, Haití, Colombia, Antigua y Barbuda, Guatemala, Honduras, Argentina, Perú, Granada, la Santa Sede y hasta el secretario de la OEA, Diego Almagro, instaron a México y Ecuador a solucionar el conflicto diplomático mediante el diálogo.

Brasil y Colombia incluso consideraron que una de las maneras en las que Ecuador puede mostrar buena voluntad por restablecer sus relaciones diplomáticas con México, es devolviendo su condición de asilado a Jorge Glas e incluso otorgándole un salvoconducto para que pueda asilarse en el país gobernado por Manuel López Obrador.

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