En su testimonio anticipado, dentro del caso Metástasis, Mayra Salazar habló sobre las actividades que realizó con el exasambleísta socialcristiano Pablo Muentes. Así detalló, esta tarde, que el juez Johan Marfetán le presentó a Muentes.
Tras ello, fue contrata por el exlegislador. Él le pagaba USD 2 500 mensuales en efectivo, por manejar la comunicación de Fabiola Gallardo, expresidenta de la Corte Provincial de Guayas.
Salazar indicó que, en octubre de 2023, fue contratada por el Consejo de la Judicatura, porque Muentes se lo solicitó a Wilman Terán. Muentes “manejaba” a los vocales Terán, Xavier Muñoz y Maribel Barreno en el Consejo de la Judicatura, a cambio del apoyo en la Asamblea Nacional, indicó Salazar.
Muentes, Alarcón y Gallardo le ordenaron a Salazar que intervenga en el habeas data presentado por Muentes contra el Banco del Pacífico. El juez Reinaldo Cevallos aceptó la acción y fue “premiado” con un ascenso a la Corte Provincial, a través de un concurso manipulado por Fabiola Gallardo.
Salazar señaló, además, que manejaba el troll center de Muentes, para atacar al abogado del Banco del Pacífico y a María Josefa Coronel. Indicó que Muentes tenía diferencias con Coronel, porque ella no otorgó un contrato de limpieza a las asociaciones del exasambleísta.
Además, Salazar y Susana Batallas, coordinadora de la Corte Provincial del Guayas, descifraron y manipularon el sistema de sorteos para una demanda civil presentada por el Banco del Pacífico. Luego, hicieron que se traslade a un juez que no había aceptado “colaborar”.
En otra arista de su testimonio, Salazar contó sobre la manera en que Pablo Muentes traficaba tierras. Habló de la existencia de un macrolote de mil hectáreas, que en su momento fue de los hermanos Isaías. Dijo que fue fraccionado en 10 lotes y en cada lote se asentó una asociación. Afirmó que Pablo Muentes Alarcón, a través de sus operadores del Ministerio de Agricultura, hizo que se les adjudiquen estas fracciones a varias personas naturales y estas vendieron a través de sus operadores a Muentes y a miembros de su familia. «Si a mí me llega a pasar algo el único responsable es el señor Pablo Muentes Alarcón», dijo Salazar.
Al finalizar la primera parte de su testimonio, Salazar explicó que, en diciembre de 2022, una amiga suya fue detenida y ella la ayudó para que no fuera enviada a un pabellón, durante el día que estuvo en prisión. Al salir de la cárcel, esta mujer buscó a Salazar y le entregó una agenda pequeña en la que constaban los nombres de los operadores de Xavier Jordán, supuesto socio de Norero. Salazar entregó esa agenda a la Fiscalía y ahora es parte de su cooperación en el caso Metástasis. Salazar identificó a esa amiga como Carolina Jaume.