La dirigente de la extrema derecha francesa, Marine Le Pen, invitó el lunes a irse del país al delantero sueco del París Saint-Germain Zlatan Ibrahimovic, que la víspera calificó a Francia de «país de mierda».
«Quienes consideran que Francia es un país de mierda pueden irse, es así de simple», declaró Le Pen a la emisora France Info.
«Hay cosas más importantes de las que habría que hablar hoy», agregó empero la líder del Frente Nacional.
Otros políticos criticaron asimismo las declaraciones del futbolista aunque sin abundar en la polémica.
Una de las figuras del ala izquierdista del gobernante Partido Socialista, Jérôme Guedj, calificó también de «inaceptable» esa «especie de capricho de estrella». «Que juegue al fútbol y que cierre la boca, o al menos que sea respetuoso con este país», dijo.
La oposición de derecha, por su parte, relativizó la importancia de las palabras del futbolista, como el exministro Bruno Le Maire, que calificó el episodio de «polémica totalmente inútil».
El domingo, después de que su equipo perdió en el campo del Girondins de Burdeos, el jugador sueco afirmó: «En 15 años, nunca he visto un árbitro así. En este país de mierda. Este país no merece al PSG».
Su comentario fue filmado por una cámara de televisión. Zlatan Ibrahimovic se disculpó después en un comunicado.