Con sus últimas fuerzas, Cathy tomó la mano de su marido, Johnny. Ambos estaban en situación crítica pero aún mantenían el reflejo necesario y último como para sostenerse mutuamente, hasta el final, como lo habían estado haciendo desde que se conocieron y enamoraron hace 50 años. Golpeados severamente por el coronavirus, ambos batallaron durante un mes contra la enfermedad
Su salud ingresó en el extraño laberinto que propone la COVID-19 del cual no podían salir pese a los esfuerzos médicos por impedir que sus vidas se apagaran. Finalmente, Johnny Lee Peoples, de 67 años, y su esposa Cathy Darlene Peoples (65) murieron el pasado 2 de septiembre en el Centro Médico Regional Novant Health Rowan en Salisbury, Carolina del Norte.
Pero minutos antes de que sus vidas terminaran, los médicos decidieron reunirlos en una misma habitación, así podrían despedirse. Se tomaron de la mano y sus ojos nunca más volvieron a abrirse, según lo contó a la revista People uno de los tres hijos que tuvo el matrimonio, Shane Peoples.