Desde el 13 de septiembre de 2020 deja de regir el estado de excepción. Viene una etapa de menos restricciones en la que el Gobierno apela a la sensibilidad ciudadana. Ecuador entrará de lleno en una nueva normalidad, con menos restricciones, con el objetivo de reactivar la economía. Para evitar un aumento en el número de contagios, el Gobierno lanzó la campaña ‘Yo me cuido’. La iniciativa está orientada a promover la corresponsabilidad ciudadana a la hora de tomar precauciones.
Lamentablemente dicha campaña es tan débil que no ha tenido ni el mínimo impacto en la ciudadanía
Salubristas y epidemiólogos consideran que Ecuador no está preparado para la eliminación de las restricciones.
Desde el sector empresarial, la eliminación del estado de excepción es vista como un impulso para la recuperación del sector productivo. Los empresarios aclaran que mantendrán los protocolos de seguridad. La Organización Mundial de la Salud y estudios internacionales establecen tres parámetros para que un país relaje las medidas restrictivas: Reducción sostenida de las muertes en exceso. Una tasa de positividad inferior al 5%. La disminución sostenida de los contagios durante al menos tres semanas. Muertes en exceso Desde el 1 de marzo hasta el 27 de agosto de 2020, el Registro Civil reporta 30.054 muertes en exceso, pero la entidad no especifica las causas de los decesos. Ese número muestra el aumento de muertes que se han producido entre marzo y agosto de este año en comparación con los mismo meses de 2019.
Si bien no se conoce cuántos de estos decesos ocurrieron por Covid-19, el profesor de la Pontificia Universidad Católica, Santiago Ron, explica que muchos “son atribuibles a la enfermedad“.
Datos del Registro Civil revelan que el número de muertes en exceso varía mes a mes.
En abril, mayo y julio hubo picos, mientras que en junio y agosto hubo bajadas.
Esto, a criterio de Ron, significa que aún “no se puede decir que las muertes en exceso muestren una tendencia sostenida a la baja”.