Los principales vinicultores de California rechazaron este viernes la demanda de que varios de sus vinos contienen peligrosos niveles de arsénico.
La demanda, presentada el martes, alega que 28 bodegas producían a conciencia vino contaminado en contra de las leyes del estado y sin informar a los consumidores.
Pero una organización de productores tachó la demanda de «falsa y engañosa» y aseguró que los vinos estadounidenses son seguros.
El arsénico es un elemento químico que se encuentra de manera natural en el aire, el agua y el suelo, pero en grandes cantidades puede ser mortal.
La demanda asegura que las pruebas de tres laboratorios independientes mostraban que en algunos casos el tóxico estaba presente seis veces más de lo que permite la ley.